¿Qué es la cirugía laparoscópica y cómo puede ayudarlo?

Para poder saber con precisión y rapidez si una persona tiene gigantismo, un médico debe completar un examen médico

Los crecimientos gigantescos son causados ​​por una cantidad excesiva de hormona del crecimiento liberada por la glándula pituitaria. Otras posibles causas son: leucemia, cáncer u otras enfermedades que provocan la producción de un tipo específico de tumor. Algunas personas padecen algunas de estas enfermedades. Esto suele ocurrir debido a un desequilibrio hormonal en el cuerpo. Si el crecimiento de la glándula es excesivo, esto puede ser un signo de gigantismo.

La glándula pituitaria produce hormonas como insulina, glucosa y adrenalina. Todas estas hormonas son esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Cuando la glándula pituitaria libera más de lo necesario, el cuerpo entra en estado de shock. Esto puede causar algunas complicaciones graves.

Las personas que sufren de gigantismo también pueden experimentar algunos crecimientos anormales en el área de la cara, los brazos, el cuello, la espalda o el estómago que no se consideran relacionados con el crecimiento normal del cuerpo. Estos crecimientos pueden ser muy notorios y pueden ocurrir en cualquier lugar. A veces, estos crecimientos ocurrirán a la misma hora todos los días o pueden ocurrir en diferentes momentos.

Si una persona que sufre de gigantismo experimenta alguno o todos estos síntomas, un médico debe examinarlos para detectar un posible gigantismo. Un examen físico ayudará al médico a determinar si el cáncer o alguna otra afección médica está causando el gigantismo. Si el cáncer es la causa del gigantismo, es posible que su médico necesite cirugía o quimioterapia para corregir el problema. A veces, la cirugía también puede corregir el problema causado por el gigantismo. Si el gigantismo no es causado por cáncer, entonces la cirugía o la quimioterapia pueden solucionar el problema.

Muchos médicos recomiendan que el paciente se someta a una resonancia magnética o una tomografía computarizada para determinar si hay un problema con la glándula pituitaria. A veces, se puede encontrar un tumor durante esta prueba. Si se encuentra un tumor, el médico puede extirpar toda la glándula pituitaria o solo una parte. Si no hay tumores, el médico puede optar por cirugía o quimioterapia para corregir el problema.

Si el médico sospecha gigantismo, se realiza un examen médico mediante un examen físico. Una prueba endocrina es un examen físico que ayuda a determinar si una persona tiene gigantismo. También se puede realizar un ECG o una ecografía.

 

Si un médico sospecha que una persona sufre de gigantismo, se pueden realizar una serie de pruebas para determinar qué tipo de tratamiento médico necesita. Una prueba que se puede realizar es una prueba que mide la presión arterial y la frecuencia cardíaca de un paciente.

Un examen físico ayudará al médico a determinar la causa del gigantismo y le dará información sobre el paciente. Después de realizar un examen físico completo, un médico evaluará al paciente y averiguará si se requiere o no un procedimiento quirúrgico. Si se requiere un procedimiento quirúrgico, el médico puede solicitar uno con láser. En algunos casos, el médico también puede recomendar que el paciente se someta a una cirugía o quimioterapia para corregir el problema.

Si el médico sospecha que un paciente puede tener gigantismo, debe discutir las opciones de tratamiento con el paciente antes de realizar una cirugía o someterse a cualquier forma de terapia. Después de recibir el tratamiento, el médico podrá determinar si la afección se ha curado.

Aunque la cirugía y la quimioterapia pueden usarse para corregir un problema causado por el gigantismo, muchos pacientes prefieren no someterse a una cirugía para curar su afección. Muchos médicos creen que la cirugía y la quimioterapia son solo una solución temporal al problema y que puede reaparecer en el futuro.

La cirugía laparoscópica es un procedimiento quirúrgico en el que se usa un laparoscopio grande para ingresar al abdomen a través de la boca del paciente. El laparoscopio está conectado a una cámara de video de alta potencia que permite al médico ver al paciente de adentro hacia afuera y ver el interior del cuerpo durante la operación.